Maldito bar.

Caminé con los pies descalsos
siempre el mismo sendero
de la rutina y el tedio
y sangraron mis pies
y se demoraron mis sueños
y vi tan distante al horizonte
pero despertaba a la mañana
y ahí estabas con tu risa
haciendo que mi día valiera la pena...

Caminé con mi herida abierta
con el ahogo que nos produce el veneno
de toda la bronca que llevamos dentro
y me azotó el viento iracundo
y me empapó la lluvia de todas las
miserias humanas
pero miraba a mi lado
y ahí estabas tu
siempre con una nueva canción en el corazón
siempre con esa mirada de libertad...

Caminé con la boca enmudecida
con los vicios como bandera
intenté ahogar a mis dias negros
en un viejo bar
y volví a casa esquivando charcos
que no existen
con los labios ennegrecidos por la noche
pero al llegar a casa
ya no estabas más...