Ojos, ojos, ojos...

Los ojos se vuelven a abrir tras una noche de locos sueños.
Tal vez fué la copa de Jerez que bebo simpre antes de dormir,
no lo se aún, tal vez viajé fuera de mi, mi mente entendió que no solo
se trata de nacer y morir,
que hay más colores que blanco y negro, que
hay más que vida y muerte.
Supongo que otra vez voy a hablar de vos
y de tu canción de redención,
de tu corazón en la cumbre del universo,
de cómo viajas en el rayo
hasta lo más alto que un rayo puede alcanzar
y de vuelta, hasta el mismo corazón del arbol que inevitablemente
muere ante tu luz.
Y al abrir los ojos, estás tan callada viéndome
con tu mirar sereno, recuerdo que era eso exactamente lo que había soñado...
Tus ojos.
No me animo a disgregar un cuadro que si yo fuera un dios,
lo dejaría suspendido en el reino de lo eterno,
brillando entre los astros de luz
En mi sueño
dios y sus hijas me hablaron através de esos ojos
el alma del mundo los deseó para ella
la calma de los lagos descansan en ellos
una lluvia de verano moja las alcantarillas de mis
emociones oxidadas por tantas heladas
y rosío sobre mis hombros
sobre mi cabeza encendida
sobre mis sentidos
que ya me desconocen.
Abro los ojos y te veo
mejor que la noche antrior...
aunque me digas:-"no me mires así"